sábado, 29 de septiembre de 2012

Deprisa.


 Rápido, rápido, señor conejo. No hay tiempo que perder.

Muévete, que el reloj es indeciso, pero letal. En cualquier momento puede parar.

No pares, no pares, corre sin cesar.

Quiéreme, besame, ámame, hazlo todo sin pensar, que el tiempo se va a acabar.

Soy lento como tortuga en la realidad, pero siempre voy deprisa en Wonderland.

Quiere, quiéreme, quiéreme mucho y ya.

Ama, ámame, ámame, hazlo ya.

Corre, corre, corre. 

Tengo miedo que este sueño se pueda acabar sin antes haberlo disfrutado como debería ser.

Quémalo todo, derrumba las barreras y echa a correr. Siente, siente, siente. Arde en pasión, hazlo deprisa o nos atrapa el reloj. Salta ese muro gigante sin pesar. Rápido, rápido.

Comete el hongo, salta a las flores y bebe el té.

Visita a la oruga y al sombrerero también.

Rápido, rápido, que el sueño se termina. Wonderland está todo al revés.

¿Ya me quieres? ¿Ya me amas? Vamos, vamos no pierdas el tiempo. Hazlo con todas tus fuerzas, que ya vamos a caer.

Aterrizamos y tengo miedo de ver la realidad.

Aquí las rosas no son rojas como en Wonderland.

¿No podríamos quedarnos allá toda la eternidad? Deprisa, sueña una vez más.